miércoles, 10 de diciembre de 2014

Sobre lauburus y estelas en Donostia

Por su interés, reproduzco aquí un comentario que me ha dejado un amable lector en mi entrada Hallazgos prehistóricos en Zarikieta (Aoiz).

Lauburu en barandilla de balcón de Donostia (calle 31 de Agosto)

En la Enciclopedia Auñamendi se comenta que había dos lauburus en la calle 31 de Agosto de Donostia:
http://euskomedia.org/PDFAnlt/folkl/014131155.pdf
http://www.euskomedia.org/aunamendi/87432/137386

Parece que el del balcón del portal número 12 desapareció al cambiarse la barandilla del balcón hacia los años 1980. Pero el lauburu del antepecho del balcón del primer piso del portal número 18 ahí sigue:
http://i.imgur.com/W1WDNpS.jpg


Hay una errata en el PDF enlazado. En “El que representa la figura 17,se encuentra en el barandado del balcón de la casa número 12 y está encerrado en unas artísticas volutas de puro estilo Luis XV” en vez de 12 debería decir 18. También en la página del siguiente enlace en “Una se encuentra en el barandado del balcón de la casa número 12 y está encerrado en unas artísticas volutas de puro estilo Luis XV”.
———————
No parece haber ningún lauburu en ninguna de las estelas del museo San Telmo, que está al lado. Se pueden ver sus fotos en http://www.donostia.org/descargas/0066BB3A2FBD1/STM_hilarriak.pdf

Para más información:
http://www.santelmomuseoa.com/uploads/Actividades/Infantil/XoxoBeltza_Cast_Prof.pdf
http://www.santelmomuseoa.com/uploads/Actividades/Maletas/Estelas-Guia-profesor.pdf
********************
Fuente: http://www.foroswebgratis.com/tema-auburu_en_barandilla_de_balc%C3%B3n_de_donostia_calle_31_de_agosto-3512-3368743.htm

Relacionado: http://donostia2013.wordpress.com/2013/04/04/lauburua-abuztuaren-31-kalean/


jueves, 30 de octubre de 2014

El menhir de Usobelartza, de nuevo vertical

Cada vez estaba más torcido: de 25º de inclinación que tenía en 1990 había pasado ya a los 45º, con lo que pronto lo veríamos caído en el suelo.

Y es que este menhir de Usobelartza no está, como muchos otros, hincado en el suelo, sino apoyado en una laja de piedra a poca profundidad y calzado con piedras. Además el terreno es de poca consistencia. Y claro, la zona está llena de ganado de cierta envergadura, que ayuda un poco a ir tumbándolo.

El ayuntamiento de Andoain se muestra muy cuidadoso con los monumentos arqueológicos que hay en su municipio, y este año ha financiado la recuperación de este monolito. Ha sido a cargo de la Brigada Forestal del ayuntamiento y de la empresa Lurrailan, y han intervenido los arqueólogos Luis del Barrio y Xabier Alberdi. Han excavado la zona hasta dejar a la vista la laja, y han colocado el pequeño menhir nuevamente en posición vertical.

El monumento está situado prácticamente en el vértice del collado de Usabelartza, hacia la vertiente del Leitzaran, entre los montes Aitzkorriko y Onddo, en medio de una turbera de la que os hablaré pronto. Por aquí se pasa, por ejemplo, al recorrer el sendero balizado PR-Gi 162 o al subir al Adarra desde Otita (Andoain).

Antes
Ahora

martes, 7 de octubre de 2014

Dos túneles especiales

Muchos de vosotros, recorriendo por el Leizarán la vía verde de Plazaola, os habréis fijado en un par de túneles con una de sus bocas inusualmente alta. A partir de Plazaola son el número 14 (debajo de Ameraun) y el 24 (más arriba que la presa de Inturia).


Como se ve en el artículo sobre túneles del Plazaola, cuando fue reconvertido de ferrocarril minero en mixto (pasajeros y carga) sufrió numerosos cambios en su trazado, orientados a obtener un mayor radio en algunas curvas y a eliminar tramos con ciertas dificultades. Alguno de esos cambios afectó a los túneles: túneles nuevos, túneles que se abandonaban, y túneles que se reconstruían junto al antiguo.


En este último caso la reconstrucción a veces fue parcial. Es lo que ocurrió con los dos túneles que nos llaman la atención. Pero ¿por qué esas bocas tan altas? Muy sencillo: en ambos casos el túnel original tenía el piso más alto que el nuevo trazado. Al modificarse el trazado, una de las bocas quedó inutilizada, abriéndose una nueva a un nivel inferior y con una altura normal. Desde la intersección de los dos trazados (nuevo y viejo) hasta la boca que sí se mantuvo la operación era rebajar el piso del túnel, agrandando la correspondiente boca hacia abajo.

El túnel 14 es el más llamativo de los dos, pues el nuevo nivel era dos metros más bajo que el anterior. La boca común, la que hubo que agrandar, es la del lado de Plazaola. Cerca del lado de San Sebastián está la bifurcación, y puede verse cómo el recorrido original se dirigía a bordear una curva del río, mientras que el modificado salva la curva atravesando el río mediante dos puentes. Al trazado viejo se accede con facilidad desde el exterior del túnel.

En el túnel 24 la boca agrandada es la de San Sebastián, y la bifurcación queda cerca del otro extremo del túnel. Aquí se construyó un muro de piedra que separaba los dos trayectos. En este caso la obra fue sólo un pequeño retoque del trazado, debido seguramente a inestabilidades del terreno provocadas por un arroyo próximo. De hecho, la boca original del lado de Plazaola está bastante tapada por un desprendimiento desde hace pocos años. El desnivel es algo mayor que un metro.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Otro posible mojón en el Leitzaran

Hace unos días he localizado una piedra de cuya existencia ya me habían hablado, creo que Jabier Salbarredi. Tenía sólo una referencia bastante imprecisa de su situación, en el valle del arroyo Ormaki, en Elduain, y tuve la suerte de que la zona alrededor de la piedra estuviese razonablemente limpia. Así que terminó apareciendo después de patear una serie de zonas pateables.

Lo de “posible” se debe a que por un lado es una piedra hincada en el suelo, en posición casi vertical; pero por otro lado está sin tallar, es bastante informe, lo que no es habitual tratándose de piedras divisorias de terrenos.

La piedra es de arenisca del terreno, con vetas de cuarcita. Mide 90 cm de alto, con una sección de 20 x 30 cm en la base y 20 x 20 arriba.

viernes, 19 de septiembre de 2014

El voltímetro de Eltzamendi

Recientemente, a raíz de un movimiento de cosas en casa, ha aparecido una pequeña joya que tenía por perdida: un voltímetro del cuadro de instrumentos de una central hidroeléctrica.

Procede de la central de Eltzamendi, situada en el arroyo Ubane (Ubaran), que funcionó hasta 1974. Por su funcionalidad (escala de 0 a -50 voltios, para corriente continua) correspondería a una dinamo excitatriz, probablemente la del grupo grande (el instalado en 1926).

Esta pieza me llegó en la década de 1970 a través de un compañero mendigoizale.

martes, 16 de septiembre de 2014

Decimoquinto cumpleaños de la web del Leitzaran

Hoy hace quince años que publiqué por primera vez contenido sobre el valle del Leitzaran en internet. Algo ya ha llovido. Y dentro de muy poco el dominio que uso ahora (leitzaran.net) también tendrá su tarta de cumpleaños “redondo”: 10 años.


Como no quiero repetirme, os remito a dos artículos que publiqué hace cinco años en los que me extiendo lo suficiente sobre el nacimiento, vida y consecuencias de este proyecto:
Técnicamente lo único reseñable en estos cinco años, aparte de ordenadores más potentes y mejores conexiones a internet, es la destacable publicación de mapas LIDAR por parte de la diputación guipuzcoana

Como siempre, agradereros vuestra paciencia al leerme. A mandar.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Una esperanza bajo la lluvia

Tarde mojada en el Leitzaran, pero te pilla cuando ya no hay marcha atrás, como pasa muchas veces.

Hace unos días subí desde Olloki hasta Urdalekun, con idea de aprovechar en lo posible antiguos caminos que hace pocos años eran practicables (algunos reconvertidos en pistas), pero en general ahora están casi todos completamente cerrados por zarzas.

Quería tomar un sendero que pasa bajo Urdalekun en dirección al collado de Moa, pasando por Aintziola borda, hasta unirse con la pista principal en Muñotxo. Ya pensaba que tendría que desistir, visto el estado general de la zona, cuando en medio de la lluvia se me aparece un humilde indicador señalando un senderito que se adapta perfectamente a mi objetivo. Gracias a él llegué al camino viejo, a las bordas y a Moa.

Alguien (posiblemente de algún club montañero) no sólo recorre aún estas antiguas rutas, sino que se molesta en poner esa pequeña señal que te alegra el día. Gracias.

sábado, 30 de agosto de 2014

El sembrador de zarzas

Recuerdo que cuando yo era crío teníamos un libro de Historia Sagrada, en el que se contaba la “Parábola del sembrador”. Tengo grabada en la mente la ilustración que la acompañaba: un labrador esparciendo semillas enérgicamente con la mano. No es la que acompaña a este artículo, pero tenía un aire.
 
Fuente: Wikipedia

En el valle del Leizarán no sólo hay basajaunes, lamias, zombies, orcos y otros entes similares; es peor: hay sembradores de zarzas.

Frecuentemente me ocurre que al ir a recorrer al cabo de unos años no ya un sendero perdido, sino una ancha pista forestal, me los encuentre intransitables debido a tan simpática planta. Y no puedo evitar el mismo pensamiento de siempre: “por aquí ha pasado el sembrador de zarzas”.

PD - En ocasiones alguien se dedica a limpiar y desbrozar antiguos caminos. Gracias.

martes, 5 de agosto de 2014

Presa de Inturia: sigue el derribo

Todo va según lo previsto. Este lunes, 4 de agosto, la empresa Construcciones Echaide ha comenzado la segunda fase del desmantelamiento de la presa de Inturia, que durará hasta septiembre. Se pretende reducir su altura otros 2,8 metros.

La presa de Inturia es un embalse que se construyó en 1913 para regular el caudal del río Leizarán, beneficiando así la toma de agua de la central hidroeléctrica de Bertxin que se encuentra muy próxima aguas abajo. Lo cierto es que no debió de ser muy efectiva, pues a los pocos años comenzó a llenarse de sedimentos, perdiendo así su capacidad.

Lo más notable de esa presa (aparte de su construcción, con unos cuantos llamativos escalones) era el propio embalse o remanso, que se extendía más de un kilómetro aguas arriba y había creado su propio ecosistema. El conjunto constituía un elemento paisajístico incomparable en el valle del Leitzaran.

La presa también representaba un obstáculo para la migración piscícola en el río, en particular de salmónidos. Parecía lógico poner algún remedio como se ha hecho en otras presas, en concreto algún tipo de escala de peces. Hubiera sido una obra de cierto coste, pero la presa y su embalse permanecerían intactos.

En lugar de eso, URA (Agencia vasca del agua) y la diputación guipuzcoana optaron por la piqueta, procedimiento que no tiene marcha atrás. Hace ahora un año comenzó la primera fase de la destrucción, justo en el centenario de la construcción de la estructura.

Paisaje del embalse

Esta entrada sigue en:
La presa de Inturia se acerca a su final (30/9/2015)